Entrada decimocuarta



Haré el hercúleo esfuerzo de ponerme a actualizar por no dejar huecos muy anchos en el calendario ese que se va rellenando, pese a la palpable falta de inspiración y a toa la panzá de cosas de lengua y filosofía, p. ej., que podría estar haciendo (o quizá, precisamente, por tener una excusa pa no ponerme a hacerlas, gñe)

El arretrato es de Enrique, mi afamado maestro de filosofía, activo militante izquierdista, hombre de principios, ex-sacerdote, renegado de la fe, para más señas, EL COMUNISTA. El retrato es de este sábado, en la playa de las Negras -que no sé dónde andarían, bueno, aparte de la Sara-.

El viaje a Graná:

JUEVES. Cueca de Guadix-Baza y Alicún de las Torres, las aguas termales bicarbonatadas y las inusitadas estructuras que originan, incluyendo los macarrones rellenos de juncos verdes y el muro natural de travertinos -que no de travestidos-. En el autobús, este hombre de la foto y yo deleitamos al público con Villatripas, como aquella mÿthîcä vez yendo pa la Nieve. Estuve poco en el gallinero, prefiriendo irme palante a disfrutar de las charlas filosóficas y antropológicas, las infinitas y rimbombantes anécdotas de Fernando Tejero y a explicarle, en pasando por allí, el sistema hidrológico del Chirivel y el cerro Roquez. A la noche, llegada al hotel, fuimos recibidos con un pedazo de gordaco malahostia que mandó a tomar por culo el aprecio de tos los zagales por la gente de Graná.

Nos tocó a mi tocayo y a mí la habitación más SÓRDIDA que he pisado nunca. En "el entresuelo", estaba, para llegar desde el ascensor o la escalera había que subir y bajar cuatro veces y doblar por lo menos 5. Un cuarto a viga y revoltón vista -lo que me agradó- pero 10 centímetros más altos, nosotros, y teníamos que haber andao agachaos. Al ducharse, el agua, que salía de la alcachofa en todas las direcciones posibles, mojaba el bajísimo techo y le iban cayendo a uno gotas frías durante la ducha. La televisión, lo más pintoresco que he visto.

Por la noche fuimos unos cuantos a vagar por ahí y a comer en una tal Antigualla, un bar bohemiucho donde el tío hacía torres para servir las bebidas, y luego, tras mucho insistir algunos -estaba la gente hecha mixtos- a unos tales Tantra Gar y el Granada 10 ese, un teatro reconvertido en discoteca de chungos y chulos -alto éxito de mis compañeras con ellos- con cómodos asientos dorados repartidos por la estancia. Acabaríamos sobre las 4:30-5:00.

VIERNES: Por la mañana, tras un desayuno cutre-aceptable, traspusimos para la falla de Nigüelas. Un temporalazo bien recio nos dio la vuelta, quedándonos a una explicación en un centro de interpretación con una chimenea tan hermosa como atractiva. Nada, nos asomamos a ver más fallas desde el autobús, y vuelta a donde estábamos. Comimos el grupillo de la noche en un Bocatta, me creo.

Por la tarde, los que no eran de geología se fueron con el Comunista pal Albayzín (donde a la Mª Dolores le dio un arrechucho); nosotros, a Sierra Elvira, a ver las fallacas tan graciosas que había. Subimos la empinada cuesta -algunos pollinos atravesaron cerro a través y eché algunas fotos artísticas, arriba vimos el panorama, seguimos recibiendo explicaciones, nos metimos con los mapaches, y poco más. Ah, y la foto en grupo.

Por la noche, a salir por ahí otra vez. Comimos de tapas en el célebre Güejareño con los maestros, recibiendo otra andanada de anécdotas y disertaciones. Iba yo un poco mareaújo, pero se me pasó bien. Dimpués, al Jameson y otra vez al Granada 10, menudo espectáculo dimos con el bailarín. A las 6 terminamos, creo.

SÁBADO. A la vuelta, que no hubo Dios que levantara a mi tocayo, nos paramos a comer en la Venta del Pobre, papas a lo ídem. Luego vimos una miaja de Tabernas, una cueva de T-Sorbas, que más de uno casi se escalabra, y terminamos en las Negras.

Se me acaba el fuelle. Dedicaré esta letra al Enrique, que el muy rojo de pacotilla ni se la sabía, tampoco.



Arriba, parias de la Tierra.
En pie, famélica legión.
Atruena la razón en marcha,
es el fin de la opresión.

Del pasado hay que hacer añicos,
legión esclava en pie a vencer,
el mundo va a cambiar de base,
los nada de hoy todo han de ser.

Agrupémonos todos,
en la lucha final.
El género humano
es la internacional.
(bis)

Ni en dioses, reyes ni tribunos,
está el supremo salvador.
Nosotros mismos realicemos
el esfuerzo redentor.

Para hacer que el tirano caiga
y el mundo siervo liberar,
soplemos la potente fragua
que el hombre libre ha de forjar.

Agrupémonos todos,
en la lucha final.
El género humano
es la internacional.
(bis)

La ley nos burla y el Estado
oprime y sangra al productor.
Nos da derechos irrisorios,
no hay deberes del señor.

Basta ya de tutela odiosa,
que la igualdad ley ha de ser,
no más deberes sin derechos,
ningún derecho sin deber.

Agrupémonos todos,
en la lucha final.
El género humano
es la internacional.
(bis)


Saludos cordiales.

3 comentarios:

Sr. Sabuco dijo...

PD: Hecho notable a resaltar, también: lo de la vaca y la gitana LOL

Anónimo dijo...

joer, vaya esperpento de profe de filosofia k tienes
Nada k ver con nuestro insulso profe de... (elige entre 4 ó 5 asignaturas)
Nosotros también anduvimos x akellas tierras,
por casualidad cuando estabais en las cuevas os dijeron, APAGAD LAS LUCES??
y luego las niñitas soltaban un gritito??
supono k harán igual para todos...
En fin adios!!!

Anónimo dijo...

Has borrado mi comentario(y eso que era el primero)¬¬, pero bueno, comentaré algo de la foto para que no me lo borres:

-Tu profesor me recuerda a Tomás Guash, célebre crítico de fúrgol.
-Vaya un mierdón de playa, toda de rocas.
-"En el autobús, este hombre de la foto y yo deleitamos al público con Villatripas"
Me hubiera gustado ir nada más que por veros a ti y a Tomás Guash cantando eso.

Ale, espero que esto sea considerado más sustancial que mi anterior firma.

Planas qu'angunos fiajes me s'apetece 'esfisar